Archivo de la categoría: ALELUYAS ENCADENADAS

AMANECER DE NUEVO

Especialmente para ti, que eres mi amanecer…
… y no pretendo ofenderte con esto,
es sólo lo que siento…
… gracias por ser.

AMANECER DE NUEVO
(Alejandrinos consonantes)

Amanecer de nuevo, cuando tu alma me toca,
amanecer de nuevo, en mis tardes y noches,
eres en mi conciencia sensación de reproche
porque miro tu imagen y saboreo tu boca.
Amanecer de nuevo, cuando tu piel provoca,
amanecer de nuevo, cuando el sol ya no llueve
y disfruto en mi cuerpo tus manos que se mueven
y el furor de mi sexo no tiene contraseña,
comienza en la sonrisa de una luna pequeña
que al saber mi secreto, siguiendo mi mirada,
no le importa si muero, se ríe a carcajadas.
y amanece conmigo en mi lecho de amor.
Amanecer de nuevo, cuando siento el calor
de aquello que me cuentas, que me hace conocerte
que penetra, me ultraja y me hace poseerte,
en la piel, en la carne, como antes fuiste cielo,
tu varonil silueta sabe quitarme el velo
para entrar más adentro del ente que razona,
consiguiendo brindar calor a mis hormonas,
para encontrar mi esencia, mi clímax, mi delito.
Yo amo tus virtudes, tu cuerpo necesito;
yo amo tus palabras, por tu gemido muero;
yo amo tu respeto, por tu descaro espero;
yo amo tu franqueza, me mueve tu placer,
pero deseo tu hambre, mi nuevo amanecer.

© Sorgalim
Milagros Hernández Chiliberti
Ingeniera de Sueños

EL SUEÑO DE ANDRÉS Y SIMÓN

EL SUEÑO DE ANDRÉS Y SIMÓN  –  (Para niños pequeños y niños grandes)

–Hola Simón ¿Cómo estás?
¿Qué vamos hoy a jugar?

Yo traje un trompo rayado
para bailarlo en el suelo,
también tengo un papagayo
para volarlo en el cielo.

¡Simón… estás distraído!!
¿No quieres jugar conmigo?

–¡Andrés, estaba soñando

que ya estábamos jugando!

Navegábamos por mar,
los mil caminos surcando,
buscando la Libertad
de mi pueblo americano.

Dirigiendo batallones
hermanando las naciones.

–¿Es un juego con soldados

montados sobre caballos?

¡Sólo deseo ser turpial!…
o mejor un colibrí,
entre rosas declamar
y en un pétalo escribir!

También seré tu maestro,
labraré tu pensamiento.

–Andrés, tu serás poeta

el maestro de las letras.

Yo seré el libertador
de los pájaros cautivos,
con coraje y con valor
liberaré al oprimido,

Abriré las jaulas crueles
de los presos pájarillos.
para que salgan y vuelen
con la alegría de sus trinos.

– Tú serás un gran señor
¿Serás un Libertador?

Yo seré el abanderado

de las letras combatientes,
de la patria, de los campos
del intelecto valiente.

Gran guerrero y gran maestro
sueñan, Bolívar y Bello.

©SorGalim
Milagros Hernández Chilibeti
Ingeniera de sueños

Two Boys Playing Dice
1670-75
Oil on canvas, 148 x 114 cm
Akademie der bildenden Künste, Vienna

CHANZA 1

Cuando el amor llega así de esta manera
uno no tiene la culpa
quererse no tiene horario
ni fecha en el calendario
cuando las ganas se juntan

Simón Díaz

CHANZA 1

 

Del Poemario: GUASACACA Y CARCAJEO

 

 

El alma no asume el tiempo

al mismo ritmo del cuerpo.

Por pecar de corazón

sale bien pedir perdón,

cuando se sigue sintiendo

el sabor de la pasión.

 

El pecado es maravilla

si en la vejez de este cuerpo

el queso y la mantequilla

aún se siguen derritiendo.

 

Sorgalim

Milagros Hernández Chiliberti

Ingeniera de Sueños

SONATA EN SÍ Y MINUETO EN MÍ

SONATA EN SÍ Y MINUETO EN MÍ


Hay alguien que se llama igual que tú,
se despide en mi noche, y vuelve con la luz,
mas, su ritmo es sonata para el paso del muerto,
y el tuyo es la alegría de Mozart en minueto;
y todos sus espacios que fingen verdaderos
son fríos como el agua del inclemente invierno:
son cada vez más largos, y al rato más silentes
mientras que tus espacios son siempre consecuentes
y jamás te despides, te quedas en mis días
cual Mozart en minueto, me llenas de alegría.

Hay alguien que igual que tú se llama
que se atreve a decirme lo mucho que me ama,
pero su voz trillada se guinda en mi ropero
cuando mi blusa usada no cuelgo y cae al suelo,
y mis rasgos desnudos desacatan las reglas
y tu palabra suda porque es la verdadera,
no hay fonema, no hay cuentos, hay calor,
hay música de allegro en la tierra y el sol
y en una eterna fuga como Bach en su Gloria,
no hay jácara alejada, hacemos nuestra historia.

Hay alguien que como tú me nombra
y si respondo triste o alegre no se asombra,
se acostumbró a mi risa, se acostumbró a mi llanto,
no importan mis motivos si digo amarlo tanto,
pero olvidó avisarme que el sepulcro esperaba
y la mortaja blanca no estaba preparada;
y tuvo que vestirse de apamate en otoño
y por ser simulacro, nunca tendrá un retoño
y la sonata suena con Beethoven ausente
cuando el amor se escucha, pero solo es sainete.

Hay alguien que me nombra como tú
pero sus nubes grises no se visten de azul,
él existe en la urgencia, tú existes en mi calma,
él ignora mis sueños, tú disfrutas mis ansias,
él confunde mi gesto cuando le pido un beso,
tú descifras mi elipsis y me besas de nuevo,
él comparte momentos y se escurre y se pierde,
me esquiva sin saber que así comienzo a verte,
se marcha en la creencia que sola me ha dejado,
y me río en tus brazos, eres mi hombre soñado. 

SorGalim

Milagros Hernández Chiliberti

Ingeniera de Sueños